La presencia de la Policía Nacional en el Cartagonova levanta todas las suspicacias
La Policía Nacional acudía este lunes por la mañana al Cartagonova para investigar un robo cometido en la Zona Business del estadio. Las decenas de aficionados albinegros que se encontraban en ese momento guardando cola para el cambio de ubicación de sus asientos para la próxima temporada se llevaron una gran sorpresa al ver cómo varios agentes accedían tanto a las oficinas como al gimnasio del Cartagonova.
Los numerosos aficionados del FC Cartagena que este lunes por la mañana se encontraban en estadio Cartagonova para llevar a cabo el cambio de ubicación de sus asientos de cara a la próxima temporada se llevaron una gran sorpresa cuando alrededor de las nueve y media de la mañana tres personas, vestidas de paisano y con chalecos de la Policía Nacional, se bajaban de un vehículo y accedían a las oficinas del club.
Los agentes portaban dos maletines metálicos. Tras mostrar sus credenciales accedieron a la zona inferior del estadio. Minutos más tarde, un vehículo oficial de la Policía Nacional con varios agentes llegaba al Cartagonova pero éstos accedían al recinto por la puerta del gimnasio.
Las especulaciones y los rumores no tardaron en surgir. Fueron muchas las teorías de los aficionados que se encontraban en el recinto de la Rambla de Benipila pero sólo una cierta: se había producido un robo.
Durante el pasado fin de semana la Zona Business del estadio Cartagonova, situada en una de las esquinas del Fondo Sur y lugar en el que se celebran desde reuniones de empresas que forman parte del club hasta conciertos musicales, había sufrido un asalto. Tras la pertinente denuncia, los miembros de la Policía Judicial se presentaron en el Cartagonova para llevar a cabo la investigación con toma de huellas, visualización de las cámaras de seguridad, etc…
La presencia de los efectivos de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado se prolongó durante tres horas, por lo que alrededor de las doce y media de la mañana abandonaron el estadio.
